DIECISIETE años recién cumplidos y una vida por delante. Demasiados momentos tristes para tan pocos años, mucho peso en mi pequeña mochila con forma de Oso Panda. Y si, me he cansado. Ahora quiero ser NORMAL, vivir como cualquier chica de DIECISIETE años y que la palabra MAÑANA deje de darme miedo.
Porque soy JOVEN, SALVAJE Y LIBRE y así es como quiero recordar mi adolescencia. Las cadenas que atan a los adultos no pueden conmigo de momento y me niego rotundamente a ser quien quieren que sea.
FOREVER YOUNG.
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